Appa (ーパ, Appa?) es un bisonte volador, nacido en el templo aire del este; muy dócil y protector con quienes lo cuidan. Viaja con Aang, Katara, su hermano Sokka, la pequeña Toph y el lémur volador Momo. Su especialidad básicamente es el transporte de pequeños números de personas. Appa tiene la capacidad básica del transporte del Aire control, llamada "Air-flow" ("corriente de aire"), que se desarrolla de forma natural en algunas especies de animales de ese mundo, y la efectúa provocando leves corrientes de aire a través de su grueso pelaje que le permiten deslizarse y levitar, pero esto (si bien es natural en él) igual le cansa un poco, y cuando lo está, suele preferir flotar en el agua para refrescarse y descansar. El flujo de aire, no le da mucha velocidad ni empuje, por lo que se ayuda con su gigantesca cola palmeada que le permite lanzar grandes ráfagas de aire que le dan rapidez y empuje, siendo esta característica, defensa y ataque en casos de emergencia. Para hacer que comience a volar, generalmente se le dice la frase: "Yip, yip".Al ser herbívoro, debe comer grandes cantidades de pasto, paja, avena, frutas, y algunos brotes tiernos. Puede pasar varios días sin comer y sin beber ya que su metabolismo es lento, y la comida demora en ser procesada (ya que tiene 5 estómagos), por lo que no necesariamente tiene que comer todos los días. Basta con una gran comida cada dos días y él estará bien. Toma bastante agua y le es muy importante ya que suele gastarla con rapidez. Casi nunca enferma, pero el cansancio le hace perder sus habilidades.
Es algo tímido, siempre es muy sumiso, y se deja guiar con mucha facilidad. Suele poner en aprietos a Aang en ocasiones, pero en general es muy obediente. Celoso protector de su dueño, es capaz de todo para salvarlo, y en más de una oportunidad se ha puesto en frente de soldados de la Nación del Fuego con tal de librar de problemas a Aang y sus amigos. Suele bastar con un coletazo de "flujo de aire" para hacer volar a toda una tropa de soldados, dejándolos aturdidos y a varios metros de distancia, lo que les permite escapar con facilidad. Le encanta viajar y jugar. A menudo busca infructuosamente imitar conductas de otras especies y, por lo general, prefiere estar acompañado. Desde el episodio Los Días Perdidos de Appa le tiene miedo al fuego.
